Cuando una campaña empieza con 10 ''celebridades'' diciendo y haciendo cosas lindas todo parece ser bueno y chévere.
Por estos días le estan dando un bombo gigante a una campaña anti minas y la cual es que este lunes 4 de abril hay que remangarse la bota del pantalón en solidaridad con las víctimas de las minas antipersonas, pero es que este problema no ataca ni en la entrada del apartamento en rosales ni en el pasto del parque de la 93 ni llegando a la oficina, es un problema en el campo, un problema en las canchas de fútbol del pueblo, en las selvas donde el campesino cruza una trocha para llegar a recoger agua, es ahí donde está el problema, y una ''protesta'' remangandose el jean Diesel y para que las niñas puedan mostrar ese día la pierna depilada y bronceada no tiene ningún sentido. ¿Será que los grupos armados se van a sensibilizar y buscar y desactivar miles de minas antipersona, solo porque el universitario se remango? Además pensémos en un punto muy importante y es que gran cantidad de las minas ''sembradas'' son propiedad de la policia y el ejercito. Si señores, la fuerza pública no tiene ni la mínima idea de donde estan las minas que puso para defenderse de la guerrilla. Siendo un armamento prohibido por la ONU y por Derechos Humanos, son minas que llevan más de 10 años plantadas y que nadie tiene registro de nada.
Es un espacio donde no cabe las ideas ni el arte como propuesta de algo útil. Seamos buenos ciudadanos, eso es algo que está en nuestras manos y a nuestro alcance, pero si pensamos que vamos a hacer algo así sea mínimo, replantiemos la protesta, y pensémos para quien trabajamos. La inconformidad, y negativa hacia estos grupos se lleva en el corazón y en el cerebro, no en el pantalón. Porque Mónica Fonseca me diga que me remangue mi pantalón, no va a dejar de pasar lo que pasa a diario en el campo.
Medio oriente se cansó de su situación, e hicieron algo. Bahrein, un reino petrolifero donde la indigencia no existe y es el tercer PIB en el mundo, y pasó lo que pasó. Imaginen en que punto estamos nosotros.
¿Dejar de ser indiferente remangandose? Dejémos de ser indiferentes reclamando, haciendo, actuando, no digo que nos armemos, pero si sembrando tolerancia desde el hogar hasta con el que bota el papél por la ventana. Es lo que podemos hacer desde la ciudad, desde la comodidad de sus cuatro parédes.
La publicidad debe solucionar necesidades de mercadeo generadas por los consumidores, mas no ser un apoyo mediático para celebridades y propuestas inútiles.
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